sábado, 13 de diciembre de 2014

Nueva vida...

Me salté el final del verano.
Me salté el inicio del colegio de mi hija.
Me salté la divertida inadaptación escolar.

Yo me había mudado a mi barrio madrileño de toda la vida con la ilusión de que si algún día tenía hijos, se criaran jugando en mi parque y yendo a mi colegio, ese del que tengo tan buenos recuerdos y del que conservo a buenos amigos.

Llegó la hora de elegir cole y saqué los galones, desempolvé el libro de escolaridad de la EGB y mi peque consiguió entrar en mi cole de toda la vida. Septiembre y los siguientes 9 años iban a estar chupados.

Y entonces llegó septiembre y Papá 2.0 volvió un día a casa con una pregunta que hacernos.

Y así fue como todo empezó a tambalearse. Las cosas importantes empezaron a cobrar más sentido y el resto cayó por su propio peso, como las hojas del otoño.

Y así fue como dejé éste blog en stand by esperando a ver qué pasaba con nuestra vida.

La vida sigue, pero la vida cambia. Y éste cambio bien merece un nuevo escenario en el que contarlo, así que, si quieres saber más, vas a tener que seguir leyéndome aquí:

sábado, 30 de agosto de 2014

El adelantado Don Elías...

El verano es época de grandes aventuras y práctica de deportes de riesgo. A unos les da por el submarinismo, la escalada, el rafting... y a los padres más descerebrados les da por la "operación pañal" o por felices ideas como aprovechar las vacaciones para que sus hijos empiecen a dormir juntos.

A nosotros nos va la marcha.

El pequeño Elías ya no cabía en su minicuna prestada. El muy malvado se dedicaba a dar vueltas como un reloj y a quedarse atascado a las y cuarto y a las menos cuarto... y estaba pidiendo a gritos (sobre todo en mitad de la noche) independizarse.

Ante el entusiasmo de su hermana mayor por compartir habitación y en vista de que mini E ya no pide de comer en mitad de la noche, nos decidimos a montar la cuna grande.

 

Todo parecía una gran idea. Lo teníamos todo planeado. Todo armonía y colores pastel en nuestra imaginación...


La primera noche la habitación fue una fiesta durante varias horas. Risas de una y de otro como si aquello no fuera con dormir. Al final acabaron cayendo.

Luego me tocó enfrentarme a mí al momento separación de entrar en mi habitación y no ver a mi bolinche dormidito. Sé que me quedan muchas etapas que vivir, pero está claro que la del "recién nacido" ya pasó, y se me ha hecho muy corto.

Nos despertamos sin interrupciones a eso de las 8 de la mañana. La cosa parecía un éxito. O un espejismo...

La hermana mayor en su afán de ejercer de hermana mayor no pierde la oportunidad de cantarle nanas, entretenerle haciendo números de marionetas o piruetas en la cama...

Así que los acostamos en silencio y al rato no puedo evitar reírme recordando este número de mis adorados Les Luthiers...



 

Y así seguimos... viendo que se nos acaba el verano y que o les acostamos por etapas y haciendo malabares o las noches son un festival y las siestas han quedado en el olvido.

Trato de tomármelo con humor, pero es que hay días en que tengo tentaciones de entrar en idealista... y yo no quiero mudarme... confío en que si dormían bien por separado vuelvan a hacerlo estando juntos cuando llegue el fresquito, la persiana bajada... no sé...

¿Cuál es vuestra experiencia? Dadme ánimos...

jueves, 24 de julio de 2014

Que los días cuenten...

Un día me dijo la pediatra... 
-¿No serás tú de las que siguen hablando de las semanas que tienen sus hijos hasta que van al cole?...
-Por supuesto que no, Elías no tiene 11 semanas, tiene 77 días... (estaba a huevo).

Y así, entre risas y sin tener que ir ya cada semana a que la pediatra vea lo precioso que está mi guaperas, hemos llegado al día de hoy. 

Y es que al principio nos dio un poco de guerra el nuevo habitante de la casa, pero ahora la verdad es que está en esa fase en la que te lo pasas pipa con él y dan ganas de estrujarle y de hacer el idiota todo el rato para oírle reírse a carcajadas y pasan las semanas que ni me acuerdo de pasar por aquí. 

Ser el segundo es lo que tiene, y más con una hermana que es un torbellino, pero estoy decidida a contar los días y a que sus días cuenten

Nos hicimos el firme propósito cuando nació de hacer las mismas tonterías que con su hermana, hacerle el mismo trillón de fotos y de no convertirle en segundón. Su hermana colabora bastante en lo que a tonterías se refiere y no tienen desperdicio los vídeos que le graba cuando se tumban los dos en la toalla. Y yo mientras acabo jugando a tonterías a las horas más insospechadas. Total, dormir está sobrevalorado

Y así, hemos llegado a sus 181 días. Una buena cifra para celebrar, porque cualquier motivo es bueno para vivir a lo loco y merendar bizcocho y es lo que se merece.



Gracias Elías por éste MEDIO AÑO de amor que nos has regalado. Y perdónanos si a veces estamos un poco locos :-)

lunes, 26 de mayo de 2014

Para mi cara bonita... ¡y la tuya! (Resultado sorteo)

Bueno, pues ya es día 26, con todo lo que eso implica. Y por mi parte me toca cumplir con mi deber sorteando el lote que nos regala Singuladerm.



Muchas gracias a todos por participar, no me esperaba yo éste éxito... espero que os animéis a comentarme más veces, aunque no os regale nada :-P

Y la ganadora es:

  1. Lydia Almansa
  2. Tormenta de Ideas
  3. Rocío
  4. Carolicia
  5. Ana
  6. Ana Aragón
  7. Abuela Ana
  8. Estelblau
  9. Sister Ana
  10. Amagic Mother
  11. Irene
  12. Susana
  13. Nadia
  14. Aerl
  15. Ángeles
  16. Laura Salinas
  17. Irantzu
  18. Carmen
  19. Cristina
  20. Rmaría Camacho
  21. Zulema
  22. Nuria Macías García
  23. Carolroma
  24. Nuria Pujo
  25. Agustín Aguerri
  26. Nievesnbj
  27. FlorBG
  28. Susana Azcona
  29. Silvia Bartolome
  30. Alisio
  31. Marina Aguerri
  32. Marta Azcona
  33. Alicia Moreno
  34. Paula
  35. María Rosa
  36. Johanna Arco
Enhorabuena a Nadia por llevarse el premio. Contacto contigo para ver cómo te hace llegar Singuladerm el lote de cremitas para ponerte estupenda.

sábado, 17 de mayo de 2014

16 semanas tiene mi amor.

Lo acabo de comprobar en el calendario. Al hacerlo me he imaginado a muchas madres españolas mirando la fecha nada más salir del paritorio.



16 semanas.

Hace 16 semanas que nació Elías.

No es un recién nacido ya. Ahora es un bebote que empieza a reírse a carcajadas, a seguirte con la mirada por toda la habitación, que trata de coger cosas, que se va fijando en todo lo que ve cuando va de paseo en su carrito, que empieza a interactuar con su hermana mayor, que mueve brazos y piernas de alegría cuando ve algo que le gusta o le llama la atención, que sigue alimentándose sólo de leche...

Y en éste país en el que vivimos pretenden que mañana su madre le deje con algún familiar o en una guardería durante 8 horas (y me quedo corta).

En nuestro caso, ya fue bastante duro que Papá 2.0 se tuviera que volver a la oficina a los 15 días de ser padre, al menos con la tranquilidad de que los peques estaban con su madre y tenemos a nuestro alrededor una buena tribu para echar una mano.

Sé que antes los padres tenían 3 días y listo. Sé que los autónomos darían cualquier cosa por poder permitirse 15 días sin trabajar como tienen los trabajadores por cuenta ajena.

Pero yo no quiero separarme de mi bebote.

Me parece cruel y despiadado pedirle a una madre que se pierda las primeras carcajadas de su hijo, que tenga que hacer malabares para continuar con la lactancia, que tenga que confiar en la tribu o en la guardería para que cuiden de lo que más quiere.

España no es un mal país para ser padres. España es una mierda de país.

No me vale el argumento de "otros están peor que nosotros". No si defendemos a la familia. Las bajas de maternidad son ridículas. Las ayudas prácticamente inexistentes. Los horarios abusivos. Las reducciones de jornada un engaño.

Yo he tenido que mirar el calendario para comprobar que hoy hacía 16 semanas que nació Elías. Y eso es, básicamente, porque no tengo trabajo.